Junto a su familia, el doctor Filártiga (Anthony Hopkins) desempeña una gran labor humanitaria, atendiendo a la gente pobre de un lugar apartado del país, a la vez que viaja periódicamente a los Estados Unidos para vender sus pinturas (con lo cual financia su clínica) y también para denunciar ante la comunidad internacional los crímenes de la dictadura de Stroessner en Paraguay. En marzo de 1976, Joelito Filártiga (Leonardo García Vale), hijo del doctor Filártiga, es secuestrado y torturado hasta la muerte por Américo Norberto Peña Irala (René Pereyra), inspector general de la Policía de Asunción, en represalia por las actividades políticas de su padre. Ésta es su historia