Salvador es un empresario atrapado en la vorágine de su éxito, un hombre cuya vida gira en torno a cifras y contratos, totalmente desconectado de su vida personal y emocional. Una llamada inesperada quiebra su burbuja de poder. Enfrenta a un dilema que le puede costar la relación con su hija, decide acudir. Un gesto simple, un pequeño obsequio, se convierte en el símbolo de una lucha interna mucho más grande: la esperanza de que vuelva a conectarse con él mismo y lo más cercano.