La historia de Mantra nos sitúa en una utopía retro-futurista en la que la tecnología no es la que nosotros conocemos y las relaciones interpersonales son frías y meticulosas. Conocemos a Marcos, quien trabaja para el gobierno para alterar los recuerdos de las personas mediante déjà vus. Para ejecutar dichas misiones, se le entregan cintas de cassette con instrucciones detalladas como donde se encontrará el sujeto, qué deberá hacer marcos para despertar ciertos recuerdos en el sujeto etc. La cinta que Marcos lleva escuchando semanas se estropea por la mitad de las instrucciones. Marcos, sabiendo la cinta de memoria es incapaz de recordarla una vez se estropea, haciéndolo incapaz de llevar a cabo la misión. Conocemos a Enrique, un operario que se dedica a monitorizar desde su laboratorio a Marcos a través del espejo del salón. Al ver lo sucedido decide mentir a la central ya que ha visto algo interesante en él.
