Eduardo Maldonado –director de Testimonio de un grupo (1970), Sociedad colectiva quechehueca (1971), y Atencingo, cacicazgo y corrupción (1973)– filmó los testimonios de campesinos de Oaxaca, Morelos, Michoacán y Guerrero en su búsqueda de trabajo y salario digno. El documental muestra el camino que suelen seguir agricultores de las zonas sur para acceder a las zonas de mayor desarrollo en el noroeste de México, persiguiendo mejores posibilidades para la subsistencia de sus familias. Desde finales de la década de los años setenta, las imágenes que abordan el tema de los jornaleros en el cine mexicano hasta la fecha no varían en tanto a las condiciones que nuestros compatriotas deben encarar en el campo.
