Jon Sistiaga ha vuelto a Irak cuatro años después del fatídico ataque estadounidense contra el hotel Palestina de Bagdad, el lugar de alojamiento de la prensa internacional durante la invasión del país en 2003. Allí fue muerto su compañero José Couso, cuando ambos cubrían la guerra. Ahora, Sistiaga nos muestra el conflicto vivido en Irak desde primera linea, acompañando al ejercito estadounidense. Durante diez días, ha vivido en una unidad del ejército que desarrolla su campaña en Irak y ha podido grabar la incertidumbre de la tropa, sus miedos, sus pensamientos, sus equivocaciones, y ha conseguido articular una denuncia contra la arbitrariedad de la guerra, la ausencia de un proyecto real y de un objetivo claro. Desde los cadetes recién incorporados que sólo quieren matar insurgentes, “malos” como ellos los llaman, a veteranos hartos de una guerra sin sentido que mutila soldados en un goteo continuo
