Nick intenta empezar una nueva vida con Celia, su novia, pero debido a su oscuro pasado, Nick tendrá primero que saldar unas deudas con su antiguo jefe. Para conseguir dinero atraca una gasolinera, pero se topa con un policía y le dispara. En su huida, Nick y Celia encuentran una casa y deciden esconderse en ella cogiendo a Víctor, su dueño, por sorpresa. La situación empeora cuando descubren que están siendo rodeados por la Unidad Especial de la Policía preparados para asaltar la casa y, casualmente, descubren los cuerpos de una familia masacrados en el salón de la casa.
