Envidiosa de la riqueza de sus compañeros de clase en el elegante internado al que sus padres lucharon por enviarla, Millicent Rankin oculta el hecho de que su padre es plomero. Invita a su amiga Beatrice Deering a su casa, que describe como lujosa, para las vacaciones, pero cree que Beatrice se negará. La vergüenza que siente Millicent cuando recibe un telegrama de que viene Beatrice le causa dolor a su madre, pero cuando la hermana de Millicent se enferma de escarlatina, Millicent va a la residencia de campo de Beatrice, donde espera conocer a un marido rico. En Deering's, Millicent pronto se decepciona de las costumbres de la sociedad. Después de casi sucumbir a las insinuaciones de Elmer Lacy, quien secretamente tiene una aventura con la madrastra de Beatrice, Millicent protege la reputación de la Sra. Deering humillándose a sí misma. Cuando se entera de que su madre está enferma, Millicent se apresura a casa y descubre la felicidad con su familia y su antiguo amor.
