Unos críticos amigos llegan a Santa Fe, y esa condición de anfitrionazgo en que nos pone la visita ya supone una historia, una película. Ahora, ¿dónde poner el foco: en los propios críticos, en los hechos del fin de semana, en nuestra vida, ahora vista con sus ojos? La propia película, que es algo que se hace a la vez que se filma, lo decidirá.