Mario tiene oído absoluto, lo cual hace su vida algo meticulosa, organizada y solitaria. Un día conoce a Juana, quien desesperada busca que le enseñen a tocar el piano. La conciencia de Mario, un antipático personaje animado, se niega, pero Mario inconscientemente busca compañía. Juana comienza a transformar su vida, haciéndole descubrir una nueva manera de amar.