En 1974, en València, unas 200 mujeres fueron trasladadas de un hospital psiquiátrico a otro. De muchas de ellas no había historial clínico, y de algunas no se sabía ni el nombre. El nuevo film de Pau García Pérez de Lara es un acto restaurativo. De identidades y de dignidades. Seleccionada para la sección Un Impulso Colectivo del D'A Film Festival, este mediometraje propone un intento de redescubrirse más allá de las etiquetas.